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EL PERFUME “HISTORIA DE UN ASESINO” DE PATRICK SUSKIND

  

EL PERFUME “HISTORIA DE UN ASESINO” es la primera novela del escritor alemán Patrick Süskind, hijo del también escritor expresionista W.E. Süskind; publicada en 1985 bajo el título original DAS PARFÜM, DIE GESCHICHTE EINES MÖRDERS Inmediatamente se convirtiendose en un best-seller, traducido a varios idiomas en todo el mundo y llevada a la gran pantalla en el 2006.

 

EL PERFUME está dividido en cuatro partes y cincuenta y un capítulos, el escritor, nos lleva al París del Siglo XVIII, donde hay poca higiene y sí mucha suciedad, una sociedad violenta pletórica de tradiciones descritas muchas veces en las páginas del libro, es exactamente en el año 1738, año que recibe al personaje central de la novela, Jean Baptiste Grenouille el cual llegaría a ser «uno de los hombres más épicos y abominables de su época» a través de su protagonista va transportando al lector a un mundo con el que no está familiarizado “el evanescente reino de los olores” y es que desde su nacimiento Jean Baptiste Grenouille, descubre y percibe el mundo a través del sentido del olfato, que tiene más desarrollado que el resto de las personas, estas, a su vez, en ocasiones encuentran inquietante dicha capacidad en Grenouille.

 

“Quien sobrevive al propio nacimiento entre desperdicios, no se deja echar de este mundo, así como así” EL PERFUME

 

Luego de su nacimiento entre pútridos perfumes, envuelto en los olores más nauseabundos, sobrevivió al sarampión, la disentería, la varicela, el cólera, una caída de seis metros en un pozo y la escaldadura del pecho con agua hirviendo.

 

Jean Baptiste Grenouille paradójicamente pasaría a convertirse en un tipo con ansias estéticas en perfumería, y es que desde la más temprana edad vienen las colisiones olfativas alrededor de él.

 

“Se enderezó con lentitud y al respirar olió el aroma de leche y queso de oveja que emanaba de la nodriza. Era un aroma agradable” EL PERFUME

 

Llegó al lenguaje asociando palabras a olores, dificultándosele los conceptos sin perfume Y notándose a las claras la pobreza del lenguaje hablado frente a los matices, sutilezas y variantes del lenguaje odorífero… Todo su mundo giraba en torno a comprender este seductor universo del perfume Cuyo propósito «era conseguir un efecto embriagador y atrayente»

 

A los quince años, Jean Baptiste Grenouille gracias a su sondeo en este volátil mundo lo condujo a percibir una fragancia desconocida para él hasta entonces. «de una sutileza y finura tan excepcionales», que «tuvo el extraño presentimiento de que aquella fragancia era la clave del ordenamiento de todas las demás fragancias» [El perfume de una adolescente de doce o trece años: como seda y leche (producto de miles de sub-fragancias como brisa marina, aceite de nuez, nenúfares, flores de albaricoque)]. Y como buen curtidor de pieles que era hasta ese instante sabía que debía inmovilizarla y sacrificarla para arrancarle sus secretos odoríferos y absorber toda su fragancia, alcanzando cimas de éxtasis hasta ese día desconocidos.

 

“Cuando estuvo muerta, la tendió en el suelo entre los huesos de ciruela, le desgarró el vestido y la fragancia se convirtió en torrente que le inundó con su aroma. Apretó la cara contra su piel y la pasó, con las ventanas de la nariz esponjadas, por su vientre, pecho, garganta, rostro, cabellos y otra vez por el vientre hasta el sexo, los muslos y las blancas pantorrillas. La olfateó desde la cabeza hasta la punta de los pies, recogiendo los últimos restos de su fragancia…” EL PERFUME

 

A partir de entonces, llega a la iluminación respecto a su destino y objetivo de su vida el cual será poder conservar la fragancia más pura que había olido nunca: «revolucionar el mundo de los olores» y para eso debía dominar el arte de la perfumería, para poder conservar administrar a discreción todos eso gratos efluvios.

 

Jean Baptiste Grenouille aprovecha su oportunidad un día que Grimal le encarga llevar unas pieles a casa de Giuseppe Baldini, un perfumista italiano muy célebre en otros tiempos, es así como pasa a formar parte de la perfumería de Giuseppe Baldini, «quien no era un creador, solo un mezclador concienzudo de olores acreditados…» su carta de presentación: «tengo la mejora nariz de París maître Baldini…Conozco todos los olores del mundo, todos los de París, aunque no se sus nombres de muchos…».

 

Allí llegó con su practicidad y experiencia en el mundo de los perfumes y su maravillosa nariz y aprendió a escribir sus fórmulas y a interpretar las composiciones de perfumes ajenos; aprendió así mismo la teoría de la obtención de los aceites esenciales por medio de destilado, prensado y el enfleurage [En sus tres variantes, empleado para extraer la fragancia más delicada de los jazmines, la rosa y el azahar. El enflorado consistía en tomar el material vegetal “generalmente flores” y ponerlo en contacto con grasa], esta última técnica no la dominaba Baldini y era en el sur de Francia donde la ejercían. Hacia allá pues marchaba Grenouille, quien al contacto con la soledad y el silencio de la naturaleza comprendió que «era del mundo en general de lo que tenía que apartarse…de los seres humanos»

 

Durante tres años, Grenouille demuestra que es capaz de crear a partir de los aceites esenciales que tiene Baldini en su taller, no solo el perfume de moda en París, sino uno mil veces mejor. Grenouille aprende el arte de la destilación de los aceites esenciales, aunque descubre decepcionado que no puede obtener más que las esencias de las flores.

 

con el descubrimiento de una cueva halló su paraíso de paz, Encantado, Grenouille pasa su vida en una cueva de esta montaña, alimentándose de lo que encuentra, y acudiendo una y otra vez a su memoria olfativa para hacerse el dios de su mundo interior compuesto por todos los olores que conoce, su paraíso de perfumes, sin humanos ni convencionalismos estorbando. [«Se había aislado del mundo para su propia y única satisfacción, solo a fin de estar cerca de sí mismo»] El placer que le produce este mundo interior se rompe el día que se da cuenta que él mismo no posee ningún olor propio y así duro en su aislamiento voluntario durante siete años… Diseña entonces un perfume para oler como un hombre perfumado [Se trataba de imitar el perfume humano], siendo advertida su existencia incluso sin ser visto, cosa que le alegró sobremanera a él, un ser ignorado recurrentemente por no tener olor.

 

Se propuso entonces crear un perfume que al aplicárselo los demás tuvieran que amarlo [Convertirse en una suerte de Dios del perfume. «Quien dominaba los olores, dominaba el corazón de los hombres…No sintió ninguna euforia cuando concibió el plan de dominar a los hombres»]; en este proceso elaboró otros aromas personales como una fragancia para pasar desapercibido, un perfume para transmitir la sensación de urgencia y prisa; otro perfume que incitaba a la compasión… Pero para su máximo propósito debía capturar la fragancia de personas que inspiraran amor: así fue cazando sus víctimas, mujeres jóvenes y bonitas…los indicios condujeron a su captura.

 

Ésta es la historia de cómo Grenouille, pasa su vida en búsqueda de nuevos olores, pero especialmente, en la búsqueda de uno propio, simbólicamente el fervor de Grenouille cuya «única ambición se limitaba al mundo de los olores» luchando por alcanzar sus “metas” que en realidad él sólo quería tener paz y ser aceptado, al leer la novela entendemos que, Grenouille dentro de la obra es un héroe y un antihéroe.

 

El libro nos hace reflexionar sobre el verdadero significado de la naturaleza humana, donde descubrimos las aberraciones de las personas que muchas veces son aceptadas socialmente por motivos religiosos o políticos.

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